La decisión judicial fue en respuesta a las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que se pronunció en favor del alcalde capitalino.
Petro había sido destituido hace un mes, después de que la Procuraduría lo destituyó y lo inhabilitó para ejercer cargos públicos por 15 años por los problemas durante el funcionamiento de un nuevo modelo de recolección de basuras impulsado por el alcalde.
El presidente Santos dijo que se trataba de una "decisión controvertida", pero insistió en que su "obligación" es "cumplir con la ley" y respetar "la independencia de los poderes".
"Las leyes, los jueces, me ordenan restituir al alcalde Petro y he firmado el decreto correspondiente para que se restituya”, dijo Santos.
“Esta decisión es en cumplimiento de la ley, no tengo alternativa", agregó.
A pedido del propio Petro, la CIDH había otorgado medidas cautelares para evitar que fuera forzado a dejar el cargo; una decisión que el Gobierno desestimó porque dijo que el pronunciamiento de la Comisión era una recomendación.
El presidente incluso había nombrado una alcaldesa encargada.
Con esta decisión, vuelve a estar vigente el referendo revocatorio contra Petro, el cual se había suspendido debido a la destitución del cargo.
Después de que Santos confirmara la restitución, el procurador Alejandro Ordóñez dijo que impugnará ante la sala civil de la Corte Suprema de Justicia el fallo del Tribunal Superior de Bogotá que ordenó el reintegro de Petro.